La muestra puede verse en Vigo y pretende visibilizar la participación de la mujer en profesiones de tradición masculina
La ausencia o escasa presencia femenina en algunas profesiones en pleno siglo XXI es una realidad que llamó poderosamente la atención de Isabel Blanco. Tras estudiar los datos de algunos sectores laborales, la creadora decidió poner en marcha la exposición «Espazos Roubados. Subversión!». Su objetivo era denunciar la pequeña participación femenina en ciertos ámbitos de tradición masculina.
La exposición, con sede en Vigo, está protagonizada por 13 maniquíes femeninas que simbolizan esos «espacios robados» en ciertas profesiones. Las figuras se muestran sentadas, en posición de espera y con un traje que las identifica. Junto a cada representación femenina, hay además una fotografía que refleja la realidad y pone en evidencia la ausencia de la mujer en el campo laboral o profesional fotografiado.
La automoción, con escasa presencia de mujeres
El porcentaje de mujeres que se pueden encontrar en sectores como la construcción, la aviación comercial, la robótica y la tecnología es muy bajo en comparación con los hombres. Por ejemplo, en la construcción las mujeres representan el 8,2% de las personas trabajadoras. Si nos referimos al personal investigador en inteligencia artificial, ellas solo son el 19% del total, se indica en la exposición.
La exhibición también enfoca la mirada en el sector de la mecánica y la automoción. En este campo, manifiesta que las mujeres son el 25,6% de los profesionales en las empresas de fabricación de automóviles; mientras que en los concesionarios y talleres de reparación son un 19,8%. Por su parte, en el pilotaje de aviación comercial, las mujeres representan el 5% del personal que ejerce estas tareas de vuelo.
Sexualización de la mujer, una tarea pendiente
Otro de los aspectos que refleja la muestra es la sexualización que sufre la mujer, sobre todo en el ámbito deportivo. En este caso, se denuncia la forma en la que la liga femenina de fútbol americano en Estados Unidos, la Extreme Football League, hace vestir a las jugadoras, obligándolas a disputar sus partidos con prendas cortas.
La exposición puede verse hasta el próximo 7 de enero en la sala Rosalía de la sede de la Diputación de Pontevedra en Vigo.