Las mujeres en la Unión Europea ganan un 12,7% menos por hora que los hombres, aunque esta brecha ha mostrado una ligera reducción con el tiempo.
A lo largo de los años, la Unión Europea (UE) ha implementado diversas políticas y medidas para promover la igualdad de género, centrándose especialmente en la equiparación salarial entre hombres y mujeres. A pesar de que este principio se estableció en el Tratado de Roma de 1957, todavía persisten diferencias significativas. Según los datos más recientes recogidos por el medio Maldita, las mujeres en la UE ganan un 12,7% menos por hora que los hombres, aunque esta brecha ha mostrado una ligera reducción con el tiempo.
Estas disparidades, junto con otras realidades nacionales, configuran un panorama variado en cuanto a igualdad de género en el trabajo en toda la comunidad europea. Maldita.es ha analizado los datos más recientes de Eurostat para exponer las condiciones laborales de las mujeres en cada uno de los países miembros de la UE.
La brecha salarial de género en la UE se sitúa en un 12,7%, según Eurostat, calculada como la diferencia promedio en ingresos brutos por hora entre hombres y mujeres en los países disponibles. A nivel mundial, la brecha salarial es del 20%, según datos de la ONU de 2023.
A pesar de estas cifras, los salarios de las mujeres se han ido aproximando a los de los hombres en la UE a lo largo del tiempo. Desde 2010 hasta 2022, la brecha de género ha disminuido en 3,1 puntos porcentuales, pasando del 15,8% al 12,7%. En 2012, la diferencia fue más marcada, con los hombres ganando un 16,4% más que las mujeres.
Varios factores contribuyen a esta brecha salarial
El empleo a tiempo parcial es más común entre las mujeres, representando el 28% de las trabajadoras en la UE en 2022, en comparación con el 8% de los hombres. Además, las mujeres tienen menos acceso a empleos de alto nivel y a menudo se concentran en sectores con salarios relativamente bajos como cuidados, sanidad y educación.
Según la ONU Mujer y el Parlamento Europeo, estos desafíos están influidos por la desigual distribución de trabajos no remunerados de cuidado, que suelen ser asumidos mayoritariamente por mujeres. Esta situación se refleja en una brecha salarial de género que tiende a ser menor entre los jóvenes y que se amplía con la edad debido a interrupciones en la carrera laboral de las mujeres.
La brecha salarial varía considerablemente entre los países de la UE
En 2022, 12 de los 26 países analizados superaron la media de la UE en términos de disparidad salarial de género. Estonia registró la mayor brecha con un 21,3%, mientras que Luxemburgo fue el único país donde las mujeres ganan más que los hombres, con un 0,7%.
España se encuentra entre los países con una de las brechas salariales de género más reducidas en 2022, con un 8,7%. Este indicador ha disminuido significativamente desde 2002, cuando la diferencia era del 20,2%. Sin embargo, persisten desafíos como el desempleo femenino, que en abril de 2024 alcanzó el 13% en España, una de las tasas más altas de la UE.
La desigualdad en el desempleo también afecta a las mujeres jóvenes en la UE
En abril de 2024, el 13,7% de las mujeres de 15 a 24 años estaban desempleadas, con tasas especialmente altas en países como España, donde el desempleo femenino en este grupo de edad alcanzó el 25,3%.
Estos datos subrayan la complejidad de lograr la igualdad de género en el mercado laboral europeo y destacan la necesidad continua de políticas efectivas para abordar estas disparidades.
